Buscan combatir la doble carga de la malnutrición

El hierro es un mineral imprescindible para el correcto funcionamiento y desarrollo del cuerpo humano; desgraciadamente, las jóvenes de Nuevo León tienden a padecer deficiencia de este elemento, lo que puede llevar a consecuencias graves. 

Un grupo de egresadas de la carrera de Nutrición de la Universidad de Monterrey tomaron en cuenta que la anemia es una posible consecuencia del sobrepeso y la obesidad, por lo que se dieron a la tarea de explorar esta relación en su proyecto final denominado, “El estado inflamatorio en la obesidad: un factor que predispone a las mujeres mexicanas a presentar anemia”. 

Lorena Lee Martínez, Diana Treviño Garza, Viviana Torres Treviño y Daniela Garza Morales dirigidas por la doctora Ana Carla Cepeda en conjunto con investigadores de la Universidad de Wageningen, en Holanda, evaluaron a 227 estudiantes de secundaria y preparatoria del sureste de la zona metropolitana de Monterrey para profundizar sobre la aparente doble carga de la malnutrición de la zona, concepto que se refiere a cuando un individuo está sujeto a desnutrición al mismo tiempo que tiene sobrepeso. 

“Trabajamos con adolescentes porque por un lado la malnutrición en estas chicas compromete su desarrollo y potencial. Pero, además, Nuevo León presenta un problema importante de embarazo en adolescentes, por lo que a largo plazo nosotras queríamos prevenir la posible malnutrición en la adolescente, que puede afectar su desarrollo, así como el del bebé si es que la mamá padece anemia”, comentó Lorena. 

La anemia es una condición que las personas no familiarizadas con el tema, pueden relacionar con la desnutrición y un bajo peso; sin embargo, las nutriólogas explicaron que la dieta carente de nutrientes de las chicas evaluadas causada por un medio ambiente obesogénico, lleva a que se tomaran malas decisiones alimenticias. Esto resulta en que estén expuestas no solo a la obesidad, sino también a la deficiencia de nutrientes y al desarrollo de anemia. 

“Llevan una dieta muy pobre en nutrientes como consecuencia de un alto consumo de alimentos ultra-procesados y azúcar, y muy pocos vegetales”, señaló Daniela. 

“Encontramos una prevalencia de anemia mayor a la nacional, y la cifra de obesidad empata con las encuestas nacionales. Nuestra hipótesis era que ‘a mayor obesidad, las chicas tendrían una mayor predisposición a presentar anemia’. La anemia puede ocurrir por varios motivos, pero uno de los principales es cuando tienes deficiencia de hierro por mucho tiempo. Nosotros no encontramos directamente la relación entre anemia y obesidad, pero la investigación continua y pronto se va a determinar si existe una relación entre obesidad y deficiencia de hierro específicamente. Por lo pronto, comprobamos que el problema de la doble carga de la malnutrición, obesidad y anemia existe en las secundarias y preparatorias.”, explicó Viviana. 

Esta relación entre la desnutrición combinada con sobrepeso y obesidad es a lo que se llama doble carga nutricional, pues el cuerpo a pesar de estar recibiendo alimento -hasta en exceso- no está consumiendo nutrientes de calidad, lo que lo lleva a desarrollar condiciones que demuestren esta deficiencia, como lo es la anemia en este caso. 

Las ExaUDEM concluyeron que los programas para mejorar la nutrición en este grupo vulnerable deben presentar una visión integral al problema que considere todas las formas de la malnutrición que coexisten en la misma población, o incluso en la misma persona. Actualmente, alumnas de la carrera de nutrición, de maestría en Educación y Psicología Clínica de la UDEM, dirigidas por un grupo multidisciplinario, continúan con la investigación explorando cómo la depresión en este grupo está ligada a la anemia y al sobrepeso, y cómo una intervención holística en huertos, psicología y educación alimentaría pudieran mejorar esta situación.