Se capacita para nueva realidad en línea

Arturo Ojeda Becerra, profesor de la Universidad de Monterrey, fue certificado por el Banco Santander, a través de Santander Universidades, e IE Foundation por haber completado satisfactoriamente el curso “Mejores Prácticas en la Enseñanza Online y el Nuevo Rol del Educador”.

Este curso está dentro del marco del fondo de ayuda a la Educación Santander IE, un programa que ofrece becas a docentes de todo el mundo para tomar cursos que buscan ser una guía básica y fundamental para cualquier profesor que se disponga a impartir sus clases en un entorno digital.

“La Dra. Angelina Valenzuela nos envió una invitación para participar en la convocatoria de Becas Santander, presenté un examen y me notificaron la aceptación para incorporarme a un curso”, comentó Ojeda Becerra.

El catedrático de la Escuela de Derecho y Ciencias Sociales explicó que migrar de la educación presencial a un curso digital, no es solo trasladar el contenido y actividades del primero a lo virtual, y que en el futuro veremos un sistema híbrido presencial y digital.

“El profesor debiera pasar a ser solo el facilitador e invertir el curso en el que los estudiantes adquieren un dinamismo mayor al presencial. Un aspecto básico es la interactividad entre el alumno y el profesor, sin que este se convierta en un expositor aburrido de su clase”, aseguró.

Agregó que un curso digital implica que tenemos a una persona del otro lado que quizás esté viendo simultáneamente otras cosas, como redes sociales, y es necesario involucrarlo en la clase y se le ponga a realizar actividades acordes a los objetivos deseados para que el aprendizaje sea efectivo.

Es indispensable adaptarse a esta época, es por ello que el profesor abraza la idea expresada por el ex presidente de España José María Aznar, quien en su participación en el Commencement UDEM el año pasado mencionó que "en el futuro habrá discapacitados digitales".

Si los profesores no cambiamos nuestra mentalidad y nos adaptamos a los cambios que ya llegaron con motivo de esta pandemia, podríamos llegar a ser "profesores discapacitados digitales" con una generación de alumnos que ya está en esa brecha digital de la cual ya no hay opción para elegir”.

Sin embargo, también advirtió que en el curso en línea se necesita generar e incentivar al alumno siempre a cuestionarse la utilidad de lo que está aprendiendo para hacerlo más atractivo.

“Al no tenerlos presentes y no poder ver sus reacciones es más difícil y a veces frustrante no poder pulsar sus reacciones a lo que van aprendiendo, por eso es muy importante la empatía y a veces romper la formalidad en el curso en línea para atraerlo más. En fin, hay un sin número de cuestiones y técnicas a considerar para la generación de un buen curso en línea”, finalizó.