Defienden la libre competencia en concurso peruano en línea
Un equipo de alumnos de Derecho y Economía de la Universidad de Monterrey se llevaron el segundo lugar en una de las categorías del concurso de la Universidad del Pacífico de Perú y el despacho Bullard Falla Ezcurra.
Es bueno retar los conocimientos y habilidades adquiridos en clase con tareas y proyectos, pero sin duda es un gran logro ponerlos a prueba en una competencia internacional. Recientemente un grupo de estudiantes de la Universidad de Monterrey participó en un concurso de Perú, en donde se colocó en el segundo sitio en la categoría “Mejor Memorial Demandado”.
Andrés Deantes Treviño, Kevin Olan Romero y Oziel Oviedo Barrón, del programa académico de Licenciado en Derecho, y Kamila Sánchez Muñiz y Estefanía Muñoz Castillo, de doble titulación en Derecho y Economía, participaron en el E-Moot de Libre Competencia 2020, un concurso organizado por la Universidad del Pacífico de Lima, Perú, y el bufete de abogados Bullard Falla Ezcurra con la intención de proveer a la juventud de experiencias prácticas sobre la libre competencia y la regulación de los mercados.
Además, los profesores Oscar Ghersi Rassi, de la Escuela de Derecho, y José Efrén Cornejo Garza, de la Escuela de Negocios, asistieron a los jóvenes en la prueba, que reunió a universidades de todo el mundo. La temática fue “Controversia en el mercado de plataformas de streaming musical”.
“La competencia giraba en torno a un caso de Competencia Económica con un toque de Arbitraje Comercial Internacional y Derecho Contractual. El caso hipotético planteaba los problemas de competencia que existían entre dos empresas ficticias del mismo mercado relevante: por un lado, Tapestry S.A., y por otro, Zeppelin S.A., en el que éste último demandaba la ilegalidad de una modificación contractual realizada por Tapestry por supuestas violaciones a la libre competencia del país ficticio de Aquemini”, explicó Oziel el caso a resolver.
El equipo se llevó la plata en el apartado de “Mejor Memorial Demandado”, que se refiere al proyecto escrito defendiendo al acusado, que en este caso fue la empresa ficticia Tapestry S.A.
El E-Moot empezó en abril con la convocatoria, para luego dar paso a las rondas orales que se llevaron a cabo a principios de agosto, en las que los jóvenes pudieron comprobar su nivel de conocimiento y destreza en las mencionadas materias, una experiencia invaluable para su desarrollo profesional.
“Este tipo de competencias pone a prueba los esenciales conocimientos básicos de nuestras carreras, la capacidad de investigar a gran profundidad los temas que sugieren, pero también forja un espíritu de trabajo interdisciplinario entre futuros economistas y abogados, para producir y sustentar argumentos sólidos en materia de Derecho de Competencia Económica”, aportó Kevin Romero.
Por su parte, Kamila Sánchez señaló que el caso a resolver fue muy interesante por el hecho de que refleja la realidad, lo que maximiza los aprendizajes adquiridos en el certamen.
“El caso es muy similar a la acusación de la Comisión Europea hacia Apple por excluir por medio de su plataforma a competidores como Spotify. Lo que lleva a la pregunta: ¿hasta qué punto una empresa verticalmente integrada puede o no utilizar esto para favorecer a sus propios intereses, y si estas prácticas favorecen o perjudican al consumidor? El mundo digital es retador y la materia de Competencia Económica está adaptándose a estos nuevos retos”, aseguró.
Fue gracias a esta capacidad de análisis lo que llevó a los jóvenes a destacar entre 31 equipos, provenientes de países como España, Guatemala, Argentina, Chile y Colombia, y ante representantes expertos del despacho Bullard Falla Ezcurra+ y la Universidad del Pacífico.
Finalmente, Estefanía Muñoz compartió que fue el trabajo en equipo, la confianza en uno mismo y el conocimiento adquirido en la UDEM lo que les ayudó a ganarse este reconocimiento y seguir forjando el camino para convertirse en su mejor versión.
Sin esto no hubiéramos ganado. Además, la UDEM se distingue mucho en la atención que proporciona a los alumnos, es decir, no nos sentimos como una matrícula más, y esto se vio reflejado en el apoyo que nos dieron nuestros profesores… Y tanto en la carrera de Economía como en la de Derecho siempre nos han fomentado la investigación, la cual fue clave para esta competencia”.
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