Alejandro Villarreal
Alejandro Villarreal, egresado de la carrera de Ingeniero Industrial y de Sistemas, es un pionero en la incorporación de experiencias y aventura en el aprendizaje para el desarrollo humano y organizacional. Ha dirigido programas de liderazgo en los que incorpora retos, dinámicas de alto impacto, aventura, desarrollo organizacional y muchas otras actividades desafiantes.
La trayectoria de Alex, tanto personal como profesional, es admirable. Su experiencia y capacidad de enfrentar retos con una actitud positiva lo ha llevado a apoyar a decenas de organizaciones como Tyson, IOS Offices y Cemex, y a escalar las montañas más altas del Himalaya, como el Everest.
Alex contó cómo inició Odisea, su actual proyecto profesional:
Odisea inició por sí solo, simplemente emergió. Empezó de manera natural como respuesta a una búsqueda, a poder desarrollar un estilo de vida al que nunca se le acabara el reto y la diversión... que lo que hiciéramos tuviera un sentido trascendental.”
Entre las herramientas que Odisea utiliza están Lego Serious play, TetraMap y Aprendizaje Experiencial, filosofías como pensamiento sistémico, coaching ontológico y sustentabilidad, así como metodologías de diálogo como Appreciative Inquiry, World Café y Open Space, que les han permitido evolucionar ofreciendo programas de vanguardia.
Uno de sus principales logros personales, que está muy relacionado con la creación de Odisea, fue el llegar a la cima del monte Everest: fueron ocho años de preparación, 15 expediciones internacionales previas, 70 días de viaje y 45 días en la montaña.
No hay palabras para describir la emoción de los últimos pasos a la cumbre. Imagina ganar una medalla olímpica pero no hay estadio, no hay más personas, solo cielo y el horizonte. Se consolidan años de trabajo y dedicación, pero al mismo tiempo no hay nada seguro. Falta bajar y regresar a casa. En la bajada suceden la mayoría de los accidentes”, mencionó Alex sobre la experiencia de llegar a la cima del Everest.
La clave para alcanzar este logro es muy clara para Alex: “Insistir, insistir y nunca desistir. Me tomó mucho más tiempo del que pensé. El apoyo de toda mi familia y amigos, pero en especial de mi esposa Lety”.
Después del Everest, en 2003, Alex cruzó Groenlandia esquiando de costa a costa, y posteriormente, de 2004 a 2008, realizó uno de los proyectos más interesantes de su vida en la UDEM: impartir la clase 'Experiencia Internacional de Liderazgo y Aventura', gracias a la cual pudo realizar expediciones de 15 días con alumnos a Ecuador, Perú, Alaska y Patagonia.
Me ha tocado ver el crecimiento y desarrollo de la UDEM. He trabajado codo a codo en varios proyectos con diferentes áreas, tengo una comunidad de amigos ExaUDEM... todo esto me hace sentir muy orgulloso. El concepto del ser humano como principio y fin, día a día se va haciendo parte de ti”.